Bancos centrales: ¡¡¡Hasta el infinito y más allá…!!!
La semana:
El pasado jueves el Banco Central Europeo (BCE) anunció, tal y como se esperaba, medidas acomodaticias que se pueden resumir en: (I) reducción de la facilidad de depósito (tasa que cobra a los bancos por sus depósitos) desde -0,40% al -0,50%, (II) para perjudicar menos a los bancos por la rebaja de la facilidad de depósito, el BCE introducirá un sistema de dos niveles (“tiering”) con el que parte del exceso de liquidez de la banca quedará exenta de los tipos negativos en la facilidad de depósito, (III) reactivación de la recompra de bonos a un ritmo de 20.000 millones de euros al mes, comenzando el 1 de noviembre y plazo indeterminado, (IV) continuará reinvirtiendo los vencimientos de los bonos en cartera, (V) el plazo de las nuevas operaciones de financiación que lanza este mes (TLTRO III) lo amplia de dos a tres años, además de rebajar el interés al que las llevará a cabo para incentivar su atractivo para los bancos. Tras estas medidas, queda claro que la posible subida de tipos de interés en Europa se retrasa, como mínimo, a finales de 2020 o principios de 2021. En este aspecto el BCE ha reiterado que no habrá incrementos hasta que la inflación se acerque al objetivo del 2%. El legado de Mario Draghi no será fácil de olvidar…
En nuestro continente la ralentización es evidente en países con un mayor peso industrial en su economía, como es el caso de Alemania o Italia, estos países podrían entrar en recesión técnica los próximos meses, y es que allí la ralentización manufacturera ya afecta al sector servicios. Mario Draghi “imploraba” la semana pasada a los gobiernos, la introducción de políticas fiscales expansivas, ya que la eficacia de la política monetaria es cada vez menor, y los dirigentes europeos son plenamente conscientes de ello. En concreto en Alemania se habla ya de un plan de estímulo presupuestario por valor de 1,5% PIB o unos 50.000 millones de euros, aunque por el calendario político, Congreso del partido socialista, y socio de gobierno, el próximo mes, su implementación y su eficacia resultan dudosas a corto plazo. Otra de las opciones que baraja la nueva presidencia de Comisión europea es si no debería trabajar en reducir la tensión comercial con Estados Unidos o simplemente aguardar a 2020 y esperar que el presidente Donald Trump ya no esté en la Casa Blanca, hoy con un índice de aprobación del 50%, cifra destacable y que le aseguraría la reelección. En los últimos meses Washington y Tokio han llegado a un acuerdo por el que se han otorgado concesiones sobre las tarifas de automóviles a cambio de que Japón permita el acceso al mercado para algunos productos agrícolas de los EE. UU. Aunque es difícil un acuerdo similar del tipo “agricultura por automóviles” en Europa; ¿alguien se imagina a los agricultores franceses cediendo en la agricultura para salvar a los fabricantes de automóviles alemanes?
En el plano geopolítico, el suministro de petróleo en el mundo puede resultar severamente afectado en el corto plazo tras un ataque con drones ocurrido este sábado en una de las instalaciones petroleras más importantes del planeta propiedad de la empresa estatal Aramco de Arabia Saudita. El ministro saudita de Energía, Abdulaziz bin Salman, dijo que los ataques habían reducido su producción de crudo en 5,7 millones de barriles diarios, aproximadamente la mitad de lo que extrae ese país en condiciones normales. Las turbulencias en el mercado del petróleo no se hicieron esperar tras el ataque. Con la apertura de los mercados asiáticos, la noche del domingo, el crudo se disparó por encima del 20%, una subida repentina que no se veía desde la Guerra del Golfo en 1991. Las dudas sobre cuándo se podrá restablecer el suministro se suman al miedo a que una escalada de la tensión entre Arabia Saudí e Irán lleve el coste todavía más arriba. Los rebeldes hutíes de Yemen, que llevan varios años en guerra en ese país en contra de una coalición internacional liderada por Arabia Saudita, se atribuyeron la autoría de los ataques. Aun así, el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, culpó a Irán, restando credibilidad a la autoría de los hutíes. Por supuesto Irán se apresuró a negar esas acusaciones. Según los expertos, la creciente sofisticación de las operaciones de drones de los hutíes renueva el debate sobre el origen de estas capacidades. ¿Los hutíes simplemente han tomado drones civiles comerciales y les han incorporado armas, o han tenido una ayuda significativa de Irán? Las tensiones entre Estados Unidos e Irán han crecido de forma incesante desde que el gobierno de Donald Trump abandonó el acuerdo nuclear que varias potencias habían firmado con Teherán y decidió reinstaurar las sanciones en contra de su gobierno. El gobierno saudita, por su parte, ha señalado que tiene la capacidad y está deseoso de responder a los ataques.
Impacto:
Desde que terminó la crisis financiera de 2007/08 millones de personas han visto que tienen trabajo pero la retribución resulta insuficiente para llevar una vida digna y que la desigualdad va en aumento. Los beneficios empresariales aumentan en detrimento de las ganancias salariales. Pero la presión social puede conseguir que esto cambie. Hace unas semanas, la Business Roundtable (BRT), uno de los principales lobbies empresariales americanos, que agrupa a 181 grandes organizaciones, lanzaba una nota (que no firmaron, por cierto, Blackstone, General Electric o Alcoa) en la que redefinía el «propósito de una empresa». Las ganancias del accionista pasaban a ser un objetivo más y se hablaba de «proteger el medio ambiente, fomentar la diversidad, la inclusión, la dignidad y el respeto». El sentido, ahora, es «crear valor para todos los grupos de interés». La sociedad civil, los reguladores y algunos políticos hablan claro: deben implicarse más en un mundo con enormes desafíos. Y este cambio de actitud viene presionado desde dentro. Los millenials- alrededor de un tercio de los trabajadores- quieren emplearse en firmas con un fuerte compromiso social. El año pasado, los empleados de Google forzaron a la compañía a que dejase de suministrar al gobierno americano un sistema de inteligencia artificial que utilizaba en los ataques con drones. Ya también vetaron un contrato de 10.000 Mll USD destinado a trasladar grandes cantidades de datos del Departamento de Defensa a un sistema de almacenamiento en la nube. En resumen, que los beneficios empresariales seguirán siendo fundamentales en el sistema capitalista, pero sin transmitir un propósito social será más difícil obtenerlos. La ciudadanía reclama un nuevo contrato social a las empresas: el beneficio no lo es todo.
El faro de los mercados:
Todos recordarán a Ivan Petrovich Pavlov. Sus experimentos le llevaron a descubrir una forma de aprendizaje denominada condicionamiento clásico. Las conclusiones de Pavlov fueron fundamentales y muchas de sus premisas se siguen aplicando en técnicas de modificación de conducta y en tratamientos psicológicos. Pavlov utilizó perros a los que se le presentaba un sonido de una campana antes de la comida. Tras varias repeticiones, el sonido por si solo provocaba la salivación de los perros. Salvando distancias, y sin querer faltar el respeto a la comunidad inversora, en los mercados hoy en día, esa “campana” son los bancos centrales y dentro de esa misma metáfora la salivación sería el “despertar del apetito por el riesgo” entre los inversores. De esta manera un estímulo neutro se ha convertido en un estímulo condicionado, generando una respuesta condicionada entre los inversores independientemente de lo que suceda en el entorno, ni lo que suceda posteriormente. El condicionamiento clásico es un elemento básico dentro de la psicología conductista, y se sigue utilizando para explicar las causas de ciertas conductas, entre ellas las adicciones. Y en la actualidad, se podría afirmar que los inversores se han vuelto adictos a las políticas ultra-expansivas de los bancos centrales: sin las actuaciones de los grandes bancos centrales sería difícil ver movimientos alcistas en la renta variable en el escenario actual.
El ataque a las instalaciones petroleras en Arabia Saudí de este pasado fin de semana es un nuevo ingrediente que introducir en la coctelera. En nuestra opinión, por el momento este potencial conflicto no irá a mayores… aunque nunca se sabe (no obstante, es un nuevo factor de riesgo para tener en cuenta). Pero dentro de esa adicción, nos preocupa que tras la reunión del Banco Central Europeo de la semana pasada y de la Reserva Federal este próximo miércoles (se espera un recorte de 25 puntos básicos en los tipos de interés), los inversores pueden quedar “huérfanos” de referencias. Y todo ello coincidiendo con el comienzo de una nueva sesión de beneficios empresariales a comienzos de octubre, que podría poner aún más sobre la mesa el temor a una desaceleración en el crecimiento global. Veremos qué sucede.
La noticia amable:
En 1999 la india Jeroo Billimoria puso en marcha Child HelpLine, una línea telefónica gratuita para que los niños de la calle puedan pedir ayuda rápidamente, como asistencia policial y atención médica, con solo marcar un número de teléfono. Para atraer a los menores y que estos confíen en el servicio, la línea es atendida por los propios niños de la calle formados para ello. Debido al éxito de la iniciativa, creó Child HelpLine Internacional, que hoy cuenta con 178 miembros en 146 países que atienden más de 20 millones de llamadas al año. Con la información de estas llamadas son capaces de influir políticas públicas y cambiar la vida de los niños.
La frase:
Y nos despedimos con una frase de Warren Buffett: “Se necesitan 20 años para construir una reputación y cinco minutos para arruinarla”.